Los perros nos hablan constantemente. Y entre ellos también, con posturas, movimientos y a través de sonidos y olores, ¡lo notemos o no! Para convertirte en un detective de perros y entender cómo tu perro siente y piensa, antes debes aprender a identificar estas señales y por supuesto, ponerlas en un contexto.
El panorama al completo
Observar al perro ‘al completo’ y con distancia, puede darte una idea rápida y general de su estado de animo: ¿dónde está su peso, en las patas delanteras o las traseras?, ¿está blandito y en movimiento? ¿quizás esta tenso, erguido y con la boca cerrada?
Un perro con el cuerpo blandito es aquél que está cómodo, incluso puede que divertido. Un cuerpo rígido, tenso, congelado, es sinónimo de estar incómodo y en guardia. Darse la vuelta y enseñar la barriga puede significar ‘dame un masajito, humano’ pero, ten cuidado y verifica que la boca y la cola están relajadas. Si la boca está cerrada y la cola tensionada y enroscada entre las patas, puede ser que el perro esté ‘disimulando’ un encuentro realmente estresante. Su mensaje puede ser ‘no quiero problemas’, pero si te pasas de la raya pueden morder u orinarse encima.


Su comunicación en detalle
Las personas que nos jugamos las manos con los perros estamos constantemente analizando como está posicionado el perro, que hace con la cola, como están los ojos, las orejas, la boca, y mucho más. Cada parte del cuerpo es como una carta y todo junto, al completo, es tan explícito como un libro abierto.
En el artículo anterior ya hemos visto todo lo relacionado con la comunicación a través del cuerpo. Y en este, vamos a centrarnos detalladamente en cómo se comunican a través de sus extremidades.
La posición de las orejas nos indican a que dirección está prestando atención y, por tanto, en conjunto con su mirada, también en qué está pensando. Si están hacia delante está en alerta, y si están hacia atrás, probablemente retroceda (miedo/inseguridad). Si una esta hacia delante y otra hacia atrás está intentando prestar atención en dos direcciones y, si están como un aeroplano intenta guardar algo, quizás su espacio o algún objeto.
Su cara, en general, es una de las partes que más información proporciona. En este artículo ya vimos en detalle la similitud de las expresiones faciales de los perros en comparación a las nuestras, los humanos. De hecho su musculatura es muy similar a la nuestra y por ese motivo, sus gestos también son muy parecidos. Sobre todo a la hora de expresar emociones.
Dicen que los ojos son el espejo del alma. Al igual que ocurre con las personas, los ojos son muy expresivos. Pueden revelar cambios muy sutiles en su estado de ánimo a través de la forma del ojo, las pupilas, cejas y su musculatura en general. Fíjate en los ojos: ¿parecen ‘duros’ y saltones o ‘suaves’ con forma de almendra? ¿Pestañea o está estático? ¿Las pupilas están dilatas (grandes) o retraídas (pequeñas)? ¿Puedes ver el blanco del ojo, en qué se está fijando?
Por cierto, y aunque lo comenté en el artículo anterior, a diferencia de la cultura humana en la que nos miramos a los ojoso para comunicarnos, en el mundo canino, los perros miran hacia otro lado para ‘desactivar’ cualquier contacto con lo que tiene enfrente. Eso sí, si entre los perros (o perro-humano) hay un buen vínculo, no habrá problema con el contacto visual.
Nota importante, y no me cansaré de decirlo: el contacto visual directo y prolongado puede traducirse en una amenaza/desafío. A menos que tu perro esté familiarizado con tus miradas amorosas, y especialmente si es un perro que nunca has visto antes, evita mirarlos fijamente. ¡Gracias!
La mandíbula y boca de un perro puede estar cerrada, tensa y retraída, o bien relajada y flexible. Es equivalente al rostro humano: cuando está en tensión tienen la boca cerrada y las mandíbulas apretadas (enfado/rabia); sin embargo, si está flexibles y abierta, es que están relajados (felicidad/alegría).
Ojo con los perros que enseñan los dientes retrayendo el hocico (se ven arruguitas encima de la nariz) y la comisura de los labios. Este gesto es peor aún si añadimos una lengua que sale y entra, en conjunto con perro estático con mirada fría que gruñe de manera grave (muy grave, de tono). Si esto ocurre, mejor que no te muevas: baja la mirada automáticamente y ladea la cabeza y un poco el cuerpo. Eso sí, no corras ni des la espalda. A veces se requiere un ojo de halcón para poder detectar los cambios más sutiles, pero estos son muy obvios y son señal de un perro muy, muy peligroso.
Contrariamente a la creencia popular, mover la cola no siempre es sinónimo de un perro amistoso: una cola moviéndose entre las patas es una señal inconfundible de miedo o ansiedad, y si está muy alta, pese a que se mueva no es buena señal, especialmente si el perro está en tensión o rígido.
Es importante fijarse, no solamente si el cuerpo está rígido o relajado, sino también dónde está cargando el peso del cuerpo. Los perros con miedo o inseguridad posicionan el peso en las partes traseras y, los perros seguros y para nada dubitativos, posicionan el peso en la parte delantera. El riesgo de incidentes es mayor con los perros seguros que avanzan sin miedo PERO, ojo con los perros con mucho miedo y sin posibilidad de escape.
Conductas de desplazamiento
Entender en qué categoría entra cada tipo de comportamiento que realiza tu perro, puede ayudarte a saber en que está pensando y por tanto qué puedes hacer al respecto. Para entender mejor su lenguaje no voy a exponer todos los tipos que hay, pero si voy a mencionar un par de ellos:
- Señales de calma: ayudan a los perros a reducir tensión, expresar miedo/excitación o evitar ciertas situaciones en ciertos encuentros sociales. Entre otras más, las más típicas son:
- Lamerse la nariz, en una situación que no implica comer (ocurre muy y una vez que empieces a verla no pararás de hacer).
- Bostezar, cuando no tienen sueño
- Sacudirse, cuando no están mojados
- Conductas de desplazamiento: son acciones extrañas, que están fuera de lugar y que no vienen al caso, como ponerse a rascar de golpe o beber agua de manera excesiva. Son señales de malestar social o estrés.
- Ponerse a olisquear el suelo como si hubiese algo interesante (para mi es el equivalente a ponerte a mirar el móvil cuando no quieres saludar a alguien)
- Rascarse de manera intensa y de golpe
En esta ocasión el gran dibujo nos lo ofrece Vet Behabiour Team. Son ilustraciones MUY útiles en general, de modo que si te apetece, puedes imprimirlo para tenerlo a mano.
Referencias
- https://petprofessionalguild.com/DogBodylanguage
- Imágenes de Lili Chin en español, desde respetocanino.wordpress.com
- What’s My Dog Thinking, Understand Your Dog to Give Them a Happy Life. Hannah Molloy.